Al casarse, esta madura tetona tuvo que renunciar a muchas de sus fantasías sexuales, pero ahora que se ha divorciado piensa recuperar el tiempo perdido. Para ello la señora recurre al porno y se ofrece a participar en un casting, donde lo único que pide es que le pongan a un chico mulato en la escena. Ella quiere sentir una buena polla negra dentro de su coño y al fin, parece que va a cumplir sus deseos junto a un joven mulato, que le da caña en la cama y logra hacer que disfrute como nunca.