Después de unas cuantos entrenamientos, el entrenador personal empezó a notar como sus clientas maduras le tiraban la caña. Hasta ahora se ha resistido, pero cuando ambas señoras sacaron a pasear sus pechotes, ya no pudo aguantarse más. Lograron ponerle cachondo y al final, sacaron brillo a su polla en un trío salvaje, donde cada una se llevó su ración de rabo y terminó quemando calorías con algo tan satisfactorio como el sexo duro.
Categoría: | Tríos |
Etiquetas: | besos, gorditas follando, maduras viciosas, rubias tetonas, tetas grandes |